El Alma vivencia a través de diferentes cuerpos un recorrido experiencial evolutivo. Gracias a este proceso integra, comprende, reconcilia, crea, expande y crece espiritualmente.
Somos un Alma que usa varios cuerpos, en vidas distintas, con papeles cambiantes, para nutrirse y experimentarse.
Esa Vida del Alma es atemporal, si al morir en un cuerpo no he podido completar y recoger toda la energía que deposité en él, por lo repentino de la muerte o por lo traumático de la misma, se produce lo que el Dr. Cabouli denomina un “atrapamiento” del Alma, una parte de su energía permanece anclada a ese instante, a esa situación tal como si estuviera sucediendo en este momento.
En ese instante quedó atrapada en el dolor, la impotencia, el shock, el pánico, la frustración, el desamparo, la incomprensión, la ira o la culpa.
Síntomas que, al revisar las circunstancias experimentadas en este nuevo cuerpo, la biografía de esta vida, no parecen tener sentido y sin embargo conectan y se justifican en un encaje perfecto con la experiencia en otro cuerpo en la que la energía se “atrapó”.
Un caso real de Alma Atrapada:
Ana nos cuenta en Consulta los sentimientos que la acompañan “desde siempre, es como que todo es injusto y no entiendo las leyes de este mundo, estoy enfadada, me siento sola, en situaciones difíciles solo quiero encogerme”
En la sesión de Terapia de Vidas Pasadas, entrando en un estado expandido de conciencia, nos topamos con una experiencia en otra vida:
Ana: Estoy en una mazmorra oscura, fría, de piedra. Solo veo una ventana con una reja muy arriba casi en el techo.
Soy una mujer, muy joven. Estoy sucia, tengo hambre, tengo frío (encogiendo el cuerpo en la postural fetal)… llevo una especie de saco que me cubre el cuerpo
Terapeuta: ¿Cómo es que estás en esa mazmorra?
A: Me han encarcelado porque he robado, solo algo para comer, algo insignificante, solo lo hice porque tenía hambre (solloza)
Me van a matar… no entiendo cómo van a hacerme esto… solo por un poco de comida… (llorando) van a ajusticiarme¡¡¡ (alzando la voz)
T: Avanza un poco más hasta el siguiente hecho significativo ¿qué está sucediendo?
A: Se abre una puerta, entran dos hombres… tengo miedo… me llevan, me cogen de los brazos… (susurrando)… me van a matar
Me sacan a un patio, y me suben a algo, donde hay una silla… hay un cura con sotana negra que me habla y reza
T: Si, sigue…
A: Me colocan algo que sujeta la cabeza… es como una diadema, ay, ay, es … el “qarrote vil”, me tapan la cara… Dios Mío… No quiero morir… me van a matar
Acompañamos a Ana a revivir la experiencia hasta atravesar todas las etapas de esa muerte, tomando conciencia de cuáles son sus reacciones físicas, sensaciones, emociones y pensamientos durante el proceso de muerte y tras ésta.
También le ayudamos a que se fije en qué modo esta experiencia se refleja en las cosas que ahora, como Marta, hace en su vida o aquellas que esta experiencia le ha impedido hacer.
Ana recupera toda la energía que estaba atrapada en ese cuerpo y concluye la sesión incorporándola a su Alma aquí y ahora.
Tras unas semanas, nos explica: “mi relación con el mundo es diferente, es como si me sintiera más conectada, menos enfadada, más tranquila. También he sentido que me abro mas con mis familiares y amigos”